Los grandes grupos bancarios ingresaron en 2018 más de 21.000 millones de euros en comisiones, casi una cuarta parte de su margen bruto de explotación y equivalente al 132% de sus beneficios conjuntos.
Las consideradas como cinco principales entidades financieras españolas (Santander, BBVA, Caixabank, Bankia y Sabadell) ingresaron en 2018 un total 21.347 millones de euros sólo en comisiones (cuentas, fondos de inversión, planes de pensiones, medios de pago, etc), un porcentaje que supone el 24% del margen bruto de sus ingresos en todo el ejercicio.
ADICAE ha comprobado, en base a las cuentas presentadas por los principales bancos españoles, que estos supuestos “costes” repercutidos a los usuarios permiten además a las entidades cubrir casi todo el gasto de personal, lo que pone de manifiesto, a juicio de la Asociación, que la banca sigue convirtiendo las comisiones en un negocio en sí mismo al margen del negocio bancario propiamente dicho (el relativo a la denominada “intermediación financiera”: captar fondos, los cuales conjuntamente con el capital propio del banco son canalizados o colocados a sus clientes)
Un claro ejemplo es el Banco Santander que con lo que ingresó en 2018 por comisiones (11.485 millones) tiene para cubrir la práctica totalidad (el 96,80%) de sus gastos de personal (11.865 millones) y la mitad de sus gastos globales (22.779 millones) de explotación.
Situación parecida a la del BBVA que con sus comisiones (4.879 millones) cubre el 79% de los 6.120 millones dedicados a gastos de personal, o de Bankia donde los 1.065 millones de euros representan más del 56% de sus costes de explotación y más del 90% de lo que gasta en sus empleados (1.161 millones).
Por su parte el Sabadell arrojaría pérdidas de 1.000 millones de euros sin los 1.335 millones ingresados por comisiones, mientras que para Caixabank esta partida (2.583 millones) supuso más del 60% tanto de sus costes recurrentes como de su margen de explotación.
De esta forma, el negocio bancario propiamente dicho queda neto del principal coste de las entidades, circunstancia propiciada por la ausencia de control y regulación efectivas en materia de comisiones bancarias, donde el abuso de la banca se ha convertido en generalizado y endémico.
Por ello ADICAE llama la atención sobre el hecho de que el incremento del beneficio de los grandes bancos en España en 2018 (que aumentó más de un 20% respecto a 2017) se sustente en la aplicación de comisiones a los consumidores, recurriendo a las mismas para tapar agujeros de balance y “recaudando” por esta vía unas cantidades que representan el 132% de sus beneficios conjuntos.
Estos datos ponen de manifiesto lo que para ADICAE es una voracidad extrema de un sector que ha venido siendo beneficiario de toda clase de privilegios y prebendas: desde el rescate financiero y las ingentes sumas de dinero público dedicadas al saneamiento de las entidades hasta las sentencias “probanca” del Supremo en materias como el IAJD.
Así mismo, dichos datos demuestran que las “advertencias” del sector y su patronal sobre el impacto de reformas legales en materia hipotecaria en los precios son simplemente amenazas sin fundamento que únicamente persiguen condicionar a los poderes legislativo, judicial, y a la sociedad en su conjunto en su exclusivo beneficio.
Como ADICAE ha destacado de manera reiterada, este tipo de posiciones de la banca no sólo no cooperan a resolver sus problemas de reputación, originados por sus abusos masivos y problemas internos de los últimos meses, sino que demuestran una vez más la imperiosa necesidad de que las entidades afronten un cambio de relaciones con la clientela y los consumidores.