El social commerce o comercio social es una extensión del comercio electrónico que se centra, en la forma de comercio a través de redes sociales en cualquiera de sus etapas, incluyendo desde la publicidad y promoción hasta la venta al consumidor final. Y es que teniendo en cuenta que en
España el 64,4% y 70,1% de las mujeres y hombres respectivamente, de entre 16-74 años son usuarias de redes sociales, lo que nos hace una idea del tremendo público al que se puede acceder a través de estas plataformas.
Algunas de las principales redes, como Facebook, cuentan ya con sus propias herramientas de compra-venta (Marketplace).
Aunque aún es una herramienta en expansión que cuenta con muchas ventajas, como la posibilidad de compraventa entre usuarios, también tenemos que tener en cuenta que estas páginas registran y conocen nuestras preferencias para, a la hora de colocar los anuncios, esos productos nos resulten atractivos y adaptados a nosotros, por ello tenemos que ser especialmente cautos con las llamadas compras por impulso en este formato de venta, ya que estamos más expuestos a que nos ofrezcan lo que queremos.