El juzgado de lo Mercantil nº 1 de Málaga/1 BIS sentencia a favor de los consumidores, en una demanda colectiva frente a UNICAJA por la imposición de la cláusula suelo en sus préstamos hipotecarios.
ADICAE ha logrado un nuevo varapalo a la banca, esta vez a UNICAJA, con la sentencia colectiva del juzgado de lo Mercantil Nº1 de Málaga, dictada el día 30 de junio del 2020.
Esta sentencia responde a la demanda presentada en enero de 2014 por dicha Asociación, en nombre de 78 demandantes, todos ellos afectados por clausulas suelo en sus hipotecas. Dichas cláusulas fueron impuestas unilateralmente sin ser negociadas de manera individual, y sin cumplir con el control de transparencia, no debiendo ser incorporadas a los diversos préstamos, y ello por que los consumidores no fueron debidamente informados de las consecuencias económicas que dicha clausula podía suponer para ellos, ni tuvieron opción de hacer una comparación adecuada con otras ofertas de préstamos teniendo en cuenta no solo el importe del diferencial que debe sumarse al índice de referencia, sino también la existencia o no de un suelo por debajo del cual nunca bajara el tipo de interés.
En consecuencia, ADICAE presentó demanda de juicio ordinario, en ejercicio de la acción declarativa de nulidad de condición general de la contratación y acción de reclamación de cantidad. Y en concreto, lo que solicitaba era:
Que se declare la nulidad, por abusiva y por falta de transparencia, de la condición general de la contratación conocida como cláusula suelo; se condene a UNICAJA a eliminarla; se condene a UNICAJA a abonar la cantidad resultante de lo que se ha ido pagando de más en concepto de intereses por aplicación de la referida cláusula desde la firma de la escritura pública hasta la efectiva eliminación de la cláusula; se recalcule el cuadro de amortización; intereses e imposición de costas a la parte demandada.
La sentencia falla a favor de ADICAE y los consumidores declarando nulas por abusivas todas las cláusulas suelo contenidas en las escrituras públicas de préstamo y condena a UNICAJA a eliminarlas, recalcularlas y a rehacer el cuadro de amortización, así como a la devolución de la cantidad resultante de lo que había ido pagando de más en concepto de intereses por aplicación de la referida cláusula con efectos retroactivos, desde la firma de la escritura pública, hasta su efectiva eliminación. Además, condena en costas a la parte demandada.
Esta sentencia concede todas las pretensiones realizadas por la Asociación en demanda, por lo que sale victoriosa una vez más.
Con este nuevo éxito de la acción colectiva de ADICAE, prosigue su campaña instando a los consumidores a no regalar ni un solo euro a las entidades, y mantiene su llamamiento a todos los hipotecados a agruparse en ADICAE y sumarse a las demandas colectivas en curso.